La Magia del Tejido.

Aprendí a Tejer cuando era un niña, recuerdo que solo tenia 10 años, desde entonce me resulta imposible parar, es muy relajante, no hay tiempo para pensar en otra cosa que no sea crear, tejer un abrigo, igual una manta o algo tan simple como una flor. Lo recomiendo como terapia para niñas o niños con problema de concentración, es muy bueno para ayudar a las personas con problema de ansiedad o discapacidad. Aprender a tejer ha sido una herramienta muy constructiva en mi vida, una fuente de ingreso y mas que eso es la fuente para mantener una mente sana apartada de vicios, me ha permitido tener muchas destrezas y precisión con mis manos. He decidido compartir mis conocimiento y motivar a la nueva generación a que aprendan a tejer y puedan crear su propio estilo y diseño.